Cine y Fotografía : Vivien Leigh y Steve McQueen (Actriz y Actor )

 




Vivian Mary Hartley (Darjeeling, India, 5 de noviembre de 1913-Londres, 8 de julio de 1967), conocida artísticamente como Vivien Leigh, fue una actriz de teatro y cine británica. Galardonada con dos premios Óscar a la mejor actriz, se la recuerda sobre todo por sus papeles como Scarlett O'Hara en Lo que el viento se llevó (1939) y como Blanche DuBois en Un tranvía llamado deseo (1951), papel que ya había desempeñado en los teatros del West End de Londres en 1949.





Tras finalizar sus estudios de arte dramático, desempeñó pequeños papeles en cuatro películas en 1935 y progresó hasta su papel protagonista en Fire Over England (1937). Elogiada por su belleza, sintió que sus atributos físicos en ocasiones le impedían ser tomada en serio como actriz. A pesar de su fama en la gran pantalla, fue sobre todo una actriz de teatro; durante su carrera de 30 años, desempeñó papeles que fueron desde las comedias de Noël Coward y George Bernard Shaw hasta personajes clásicos de Shakespeare como Ofelia, Cleopatra, Julieta y Lady Macbeth. Ya en sus últimos años, desempeñó algunos papeles secundarios en unas pocas películas.





Durante su matrimonio con Laurence Olivier, con el que estuvo casada en segundas nupcias entre 1940 y 1960, el público la identificaba a menudo junto a su marido, con el que coprotagonizó tres películas y numerosas producciones teatrales, a menudo dirigidas por el propio Olivier. Tenía reputación de ser difícil trabajar con ella y durante gran parte de su vida adulta padeció trastorno bipolar, además de episodios recurrentes de tuberculosis crónica, que le fue diagnosticada por primera vez a mediados de la década de 1940 y que finalmente fue la causa de su muerte a los 53 años de edad.​ A pesar de que su carrera tuvo períodos de inactividad, en 1999 el American Film Institute la clasificó como una de las mayores estrellas del cine clásico de Hollywood.





Estaba considerada como una de las actrices más bellas de su época, y los directores de las películas en las que actuó hicieron énfasis en este hecho. El director George Cukor la describió como una «consumada actriz, obstaculizada por su belleza», y Laurence Olivier dijo que los críticos debían «darle crédito por ser actriz y no dejar que sus juicios se vieran distorsionados por su gran belleza».​ El guionista y director Garson Kanin compartió este punto de vista y describió a Leigh como «una mujer despampanante cuya encantadora belleza a menudo tendía a oscurecer sus sorprendentes logros como actriz. Las grandes bellezas son con poca frecuencia grandes actrices - simplemente porque no lo necesitan. Vivien era diferente; ambiciosa, perseverante, seria, a menudo inspirada»





Su fallecimiento se dio a conocer públicamente el 8 de julio y las luces de todos los teatros del centro de Londres se apagaron durante una hora. Se celebró un servicio católico en la Iglesia de Santa María de Cadogan Street, en Londres, y a su funeral asistieron las celebridades del teatro y el cine británico. De acuerdo con sus últimas voluntades, Leigh fue incinerada en el crematorio de Golders Green y sus cenizas fueron dispersadas en el lago junto su casa de campo en Tickerage Mill, cerca de Blackboys, Sussex Oriental.​ Se celebró un servicio conmemorativo en St Martin-in-the-Fields, en el que John Gielgud leyó un panegírico.





Steve McQueen (Beech Grove, Indiana; 24 de marzo de 1930 - Ciudad Juárez, Chihuahua; 7 de noviembre de 1980) fue un actor estadounidense apodado The King of Cool. Fue conocido por la popular serie de televisión Randall, el justiciero (Wanted: Dead or Alive) de 1958 a 1961, y películas como Los siete magníficos (1960), La Gran Evasión (1963), El Yang-Tsé en llamas (1966), Bullitt (1968), Le Mans (1971), La huida (1972), Papillon (1973) y El coloso en llamas (1974); en 1969 se convirtió en la estrella de cine mejor pagada del mundo.​ Su hijo Chad McQueen y su nieto Steven R. McQueen también son actores.




En 1955 consiguió su primer papel en Broadway y un año más tarde actuó en papeles secundarios de cine. En 1958 protagonizó el clásico de ciencia ficción The Blob. Durante los años siguientes, de 1958 a 1961, protagonizó la serie de televisión Randall, el justiciero, que lo hizo un actor muy popular en su país y los países donde se vio, lo lanzó a la fama y le valió el reconocimiento de la crítica.

Pero la película que le convirtió en una estrella fue La gran evasión (1963). Fue nominado al Oscar por protagonizar El Yang-tsé en llamas (1966) y repitió el éxito con Bullitt (1968). Ese mismo año protagonizó otro clásico, The Thomas Crown Affair (1968).




A partir de entonces, McQueen fue combinando papeles de acción, como en la película de carreras de autos Le Mans (1971), la taquillera La huida (1972), con papeles de carácter, como en Papillón (1973), demostrando que además de estrella era un buen actor. Otros papeles destacables son los de Cincinnati Kid y su participación en la película de Sam Peckinpah Junior Bonner. A su segunda esposa, Ali MacGraw, la conocería precisamente en la también dirigida por Peckinpah y ya mencionada La huida.

Después de El coloso en llamas, una de las mejores películas de catástrofes realizada en 1974, y en la que McQueen compartió el cartel con actores de la talla de Paul Newman y William Holden, se retiró por unos años del cine. Regresó en 1978 para actuar en Un enemigo del pueblo, basada en la obra homónima de Henrik Ibsen.




McQueen fue un gran aficionado de la adrenalina, a las motocicletas y a los automóviles de carreras. Amaba las máquinas veloces y aprovechaba cada ocasión que se le presentaba para conducir él mismo los vehículos en las escenas de sus películas en las que había persecuciones de motocicletas o automóviles. En el transcurso de su carrera de actor llegó a considerar seriamente convertirse en piloto de carreras. Fue uno de los amigos personales del maestro de artes marciales Bruce Lee y se entrenó en Jeet Kune Do.

Después de 1978 McQueen protagonizó dos películas más, en una de las cuales, Tom Horn, destacó por su excelente interpretación.





McQueen murió de cáncer de pulmón el 7 de noviembre de 1980 a la temprana edad de 50 años, en Ciudad Juárez, Chihuahua, México. Se cree que su enfermedad pudo estar relacionada con la inhalación del amianto que contenían los trajes que usaba para limpiar los cascos de los buques de la Marina.


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